Noche de fantasía........ /Hisoka/

Volteo la cara para que me acerque el agua, no pienso moverme de momento. Seguro debo estar con unas pintas horribles, mi apariencia de tipo duro por los suelos, totalmente cansado y ahí inherte.

-Hazme un masaje, te lo ordeno. - Digo tratando de recuperar mi posición.

mmm... nop... no me apetece...
vamos... no te hagas tanto la victima Fantasma...
se tepasara con reposo... *sonrie*

aki te lo dejo... si lo kieres tomar bien...
sino no lo hagas...

*se sienta en el escritorio trankilamnte*

Le miro entre dolido y ofendido, y ni siquiera presto atención al vaso. Vuelvo a esconder el rostro en la almohada, derrotado por todos lados y en todos los sentidos.

-Te juro que en estos momentos te odio... y mira que aún así te quiero igual... - susurro medio adormilado, sin ser muy consciente, hasta que me duermo tal cual. Desnudo y boca abajo.

(digno de ver xDDDD)

mm... *sonrie tiernamente al verlo dormido*
*lo tapa para que no se resfrie*

*se va al salon a comer algo y luego regresa a la habitacion mientras se pone a hacer cosas al ordenador*

*pasaron 3.. 4... 5 horas... estaba empezando a cansarse de estar sentado y se puso a mirar por la ventana*

Estaba soñando con un Hisoka dulce a mi lado... pero desperté, preguntándome qué había pasado la noche anterior. El dolor en el trasero al moverme me lo recuerda de inmediato. Sacando el punto de que me duele, no estuvo tan mal. Ese Hisoka salvaje me encantó, le haría cabrear más a menudo a ver si me castigaba otra vez.

-Oh dios, soy un pervertido... - murmuro tapándome con la sábana. Me volteó, quedándome de lado, y veo a Hisoka en la ventana.

*estaba absorto en sus pensamientos y reflexionaba en voz alta*
me.. habré pasado??... y si le hice daño??
*preocupado*de... dmeo... se corrio... y no sangró... de modo...
mmm... no sé... *fumaba*

El cigarro en sus dedos se me apetecía muchísimo. Le veía mover los labios, pero no escuchaba nada. Pero parecía preocupado. Tal vez me comporté terco y orgulloso la noche anterior... Fruncí el ceño, torturándome. Tal vez debería disculparme. Pero en esos momentos se le veía genial allí en la ventana. Me quedé en silenccio observándole con media sonrisa atontada en el rostro.

*dió una calada y se giró*
*Fantasma lo miraba, solo llevaba una camiseta y los boxers*
anno... Fantasma... yo... lo de anoche...
perdona si me pasé... *miraba al suelo*

no... no kise hacerte daño...
*se sentia mal... casi keria llorar*

Me tomó por sorpresa. ¿Por qué se disculpaba él? No lo entendía.

-Ven aquí. - Susurré palmeando el trozo de colchón a mi lado, sin moverme. Me puse serio.

hai... *apagó el cigarro y lo dejó en la poyata*
*fue a su lado pero no se atrevia a levantar al vista*

Me recosté como pude, frunciendo el ceño en una mueca de dolor, para quedarme ladeado y poder abrazarle. Me había impactado mucho que se sintiera tan mal, no sabía que estuviera así.

-No te disculpes por nada. - Susurré. - Yo soy un terco, eso es todo. Me cuesta dejar mi orgullo a un lado. Pero me ha gustado, simplemente porque ha sido contigo. - Le abracé más fuerte. - Te quiero mucho, Hiso.

*le abraza en silencio con los ojos a punto de llorar*
mm... no... no keria...
hacerte daño... lo siento...
yo... te kiero mucho por.. por eso...

*le temblaba la voz*

-De daño nada, que soy muy fuerte - medio mentí haciendo una mueca, en parte sí dolía, pero solo un poco ya.

-Además, yo he sido muy bruto a veces contigo sin darme cuenta, y ahora sé lo que es. Perdóname tú a mí. - Le abracé más fuerte, besándole suavemente el hombro.

*movió al cabeza asintiendo sin poder pronunciar ni una palabra*
*le abrazaba fuerte, no keria soltarle*

Terminé soltándole, agarrando su rostro entre mis manos y besándole con todas mis ganas, infundiéndole lo que en palabras era incapaz de decir por no saberme expresar. Me separé y le hice mirarme a los ojos.

-Te quiero. - Solté, como muy pocas veces lo hacía. - Has conseguido derretir mi máscara.

*lo miraba con los ojos algo rojos*
*asiente con al cabeza*

*le besa mientras unas lagrimas recorren sus mejillas*

Sólo quería animarle, así que le cogí de la cintura y le estiré a mi lado, de espaldas a mi pecho, y le rodeé con los brazos.

-Y ahora que todo está claro, y como parece que no has dormido, vamos a darnos una siestita. - Dije acomodando el rostro en la curva entre su cuello y hombro, quedándome quieto.

*asintió y se qdó en esa postura... dejando que con el tiempo le venciera el sueño*